Eran de esos días sentimentales, preciosos para observar todo lo que le rodeaba.
Michelle llegó a la tiendita, temprano, como nunca. Comenzó a ordenar los libros y las telas, cuando entró una mujer, de tez oscura. Muy oscura. Como la noche.
-Hola -le sonrió amable, al saludarla.
La chica, con un dificultoso español intentó decirle que no lograba expresarse con claridad.
Michelle confirmó que venía desde otro lugar. Su color de piel, ese chocolate perfecto, la delató.
-My nombre is Dasha -dijo, con una mezcla de idiomas, que a Michelle le causó gracia.
-¿Eres del continente negro? -preguntó, haciendo señas por si no le entendía.
Dasha era, efectivamente, de África. Aunque ni ella sabía, técnicamente, dónde había nacido.
Michelle conocía a un par de Argentinos, un portugués y su abuelo, que era francés. Estaba encantada, realmente, de conocerle.
-¿Qué deseas? -continuó, observándola, sin hacer notoria su curiosidad.
La niña de chocolate apuntó hacia unos paños coloridos. Los favoritos de la tiendita en donde Michelle trabajaba.
-¡Perfecto! -expresó alegremente, extendiéndole telas de todos colores.
Ese día, Dasha llevó dos telas que a ambas les fascinaban, y un libro que Michelle le recomendó.
-Yo aprendí francés leyendo literatura francesa -comentó a Dasha cuando le indicaba un librito pequeño, colorido e infantil - Quizás aprendas aún mejor el castellano... Es mi libro favorito. Habla de un príncipe y su hermanita. Siempre leo para Santi antes de dormir...
De todo lo que Michelle dijo atropelladamente, la bella muchacha debió haber comprendido la mitad. Pero se notaba que ambas se agradaron.
Se conocieron justo el día bonito ése, cuando comenzó primavera, a eso de las cinco veintiuno de la tarde.
Cuando cualquier cosa de esas in-olvidables podía ocurrir.
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10 han escrito lo que sienten:
no sé porque me acordé de un trencito rojo que una vez estubo en mi pieza..
que bacan,el chocolate y la nieve juntas :)
te quiero
Yo también quiero ser una mujer de chocolate :) Muás!
Dulce encantadora mujer de chocolate :)
qué bonita historia!! :) besos! :D
Las pequeñas cosas son las que crean grandes cambios en nuestra persona.
La parte de un día muy bello e inolvidable.
Me gusta como posicionas las dos partes.
Un besazo!
hay re lindo el blog y la historia del chocolate
un beso
Recién.. pero recién recién me acabo de enterar que tenemos una amiga en común se llama Francisca Galaz :D estoy realmente sorprendida :O
que chico es este mundo.
Me gustan las mujeres de chocolate. Son misteriosas, preciosas y llenas de secretos. En definitiva, fascinantes. Me gustaría conocer una :)
Un muás para ese dinosaurio bajo tu cama :)
¡Bien! Tengo la suerte de poder ser seguidor tras haberte encontrado...y soy el 100 :)
Saludos subterráneos.
101 :D
capicúa, como las nubes que vuelven a casa.
Me gusta tu blog, compañera con la cabeza de televisión.
Lo siento, el chocolate me despista.
Hastaluego :]
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